En la oscuridad se hace la luz,es el resplandor que sobrevuela el océano bajos los anhelos de aniquilar la gran marea del capitalismo imperialista. Si Teruel existe bajo su humilde sombra de convivencia con el resto de España, Corea del Norte existe con animo de habitar en soledad el planeta.Un mundo con dos frentes, dos mitos,"el Querido líder" faro de los corazones norcoreanos y "la Coca Cola" del resto; la felicidad entretanto regurgita una y otra vez las ansias de unos y otros.
Desde algún lugar de nuestro sistema solar se divisa ese pequeño punto ázul pálido, una mota de polvo suspendida en un rayo de sol: la tierra, que con sus pequeños poros oscuros como Corea del Norte agranda la historia de vencedores y vencidos. Si nos acercamos a la tierra y observamos las dos Coreas vemos la dualidad de un imperio a otro, uno iluminado y otro oscuro, mientras unos duermen bajo el semblante del gran líder los otros a duermevela bajo el afán consumista.
Pyongyang parece de otro planeta, desde fuera todo se observa al unisono y a cámara lenta , slow motion non stop, hasta que todos llegan a su lugar de producción alentados con cantos victoriosos. Al otro lado, en nuestras calles, chocamos , nos esquivamos y cuando llegamos al trabajo nos cantan las cuarenta. Cualquiera diría que no hay que dar cuentas al líder pero hay que darlas a un sistema pervertido por las grandes fortunas y correligionarios.
Las castas norcoreanas son diferenciadas por fidelidad y utilidad al régimen: "el nucleo" formado por miembros del partido y oficiales del ejercito; "los tibios" obreros especializados, soldados diplomáticos y los residentes en Pyongyang "los hostiles"descendientes de padres "culpables , prisioneros políticos, mano de obra; y los "ignorados". Cada cual obtiene su ración diaria conforme a la pertenencia de uno u otro grupo, si eres del "núcleo" recibirás un saco de arroz , en el otro extremo,si eres de los "hostiles" solo te corresponde 250 gr. Lo triste es que gran parte de este alimento proviene de ONGs instaladas en Pyongyang y es usada por el régimen a su antojo. Ante esta situación, muchas organizaciones como Médicos del Mundo y Médicos sin Fronteras decidieron abandonar el país.
Si nos acercamos a ese punto negro en la tierra, vemos que existe un claroscuro entre la ciudad y el campo en la sociedad norcoreana, la ciudad parece ser habitada por gente modelo del régimen mientras ,por el otro lado, el campo está asediado por sus despojos ,sometiendo a la sombra a aquellos que no son útiles como son la gente discapacitada. Allí nacen sanos y sin ningún defecto como promulgan los fervientes guías.
Si nos acercamos aún más en el mapa, adentrándonos en las mentes de los norcoreanos seguro que nada es luz ni tampoco sombra, el hermetismo reina en sus vidas, la expresión se reduce al arte adulador y al fingimiento forzado con mentiras como "hoy he comido", "nunca he visto un programa de la televisión surcoreana","podríamos comprar los Estados Unidos si vendiésemos nuestras armas nucleares"... Sin más experiencia que la lectura, allí te obligan y aquí te sugieren, Corea del Norte existe, sobre todo de día.