Ha pasado casi un mes desde la última entrada en este blog, un largo paréntesis futbolistico culminado con el silencio que precede al delirio tras el gol de Iniesta, unos dieciocho segundos desde que Navas contraataca hasta que entra el balón en la portería de Sketelenburgh.Un silencio que recuerda a todos los que sufrimos por nuestra selección, aquellos que con gesto de rabia y resignación vimos nuestra esperanza arruinada a medio de camino entre la gloria y la desesperación,ay de Julio Salinas!, ay de Señor!, ay de Zubi!, ay de Joaquín!, ay de todos nosotros!.
Aunque ese silencio se tornaba en la angustiosa incertidumbre marcada por el pasado mundialista, el aliento llego hasta el final, a la red ,en ese momento el silencio se fue y el estruendo llego como si de la portería del holandés se abriera paso al paraíso para los redentores españoles al grito de soy español y somos campeones...En honor a todos los amantes del fútbol pero sobre todo a los que nunca pierden la esperanza:
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